Continúan las protestas promovidas por médicos y maestros hondureños

Tegucigalpa, 10 jun (EFE).– Las protestas que promueven médicos y maestros a favor de la salud y educación de Honduras continúan este lunes, pese a la advertencia que hizo el domingo la Secretaría de Seguridad de que no se permitirá el bloqueo de carreteras, como ha venido ocurriendo en las últimas semanas.

En Tegucigalpa, individuos con el rostro cubierto, que dicen ser estudiantes, ocuparon varios edificios de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), mientras que en la sureña ciudad de Choluteca quemaron neumáticos en un bulevar y se enfrentaron a la Policía, que intentaba desalojarlos disparando gas lacrimógeno.

Otra manifestación se registraba en la ciudad de El Progreso (norte), donde los manifestantes marcharon por una carretera, pero ocupando solamente un carril para no entorpecer totalmente el tráfico de vehículos.

La Plataforma para la Defensa de la Salud y Educación emplazó el domingo al Gobierno que preside Juan Orlando Hernández para que responda este mismo lunes a los nueve puntos que exigen para participar en el diálogo que propuso la semana pasada, luego de derogar dos decretos ligados a la educación y la salud.

La derogación de los dos decretos, que en abril habían sido aprobados por el Parlamento hondureño, era una de las exigencias de médicos y maestros que dieron pie a las protestas, de las que algunas han terminado con daños a la propiedad pública y privada como la quema de decenas de vehículos, entre ellos más de 50 contenedores de una multinacional bananera en el norte del país.

Entre las exigencias de la Plataforma para la Defensa de la Salud y Educación figuran que el mediador del diálogo sea extranjero, que se celebre en un hospital deteriorado y que se transmita en directo por televisión.

Médicos y maestros también anunciaron que las «movilizaciones pacíficas a nivel nacional» comenzarían este lunes a partir de las 07.00 hora local (13.00 GMT), en los sitios ya acordados.

El ministro hondureño de Seguridad, Julián Pacheco, dijo el domingo a un canal de la televisión local que la Policía Nacional fue «prudente y tolerante» la semana pasada, pero que «no se puede permitir que el país se paralice por el interés mezquino de grupos con otros propósitos y no necesariamente los interese gremiales».

El alto funcionario señaló que los que causan violencia lo hacen para generar el «caos y destruir el país».
Pacheco advirtió que las fuerzas del orden ya han identificado a los «encapuchados» que causan la violencia, lo mismo que a los que «protegen y dirigen esos grupos».

«Vamos a capturarlos donde quiera que estén, la Policía no puede permitir que el país se caiga por un grupo que cree que les pertenece», recalcó el ministro de Seguridad.